Por Addy Kacero

Muchos hablan de ésta práctica que cada vez cobra mayor relevancia en el ámbito laboral y empresarial pero pocos saben realmente de qué se trata. Para explicarlo de manera muy sencilla, podríamos decir que se basa en la construcción de una red de contactos profesionales, pero el concepto es realmente más abarcativo puesto que además implica una dinámica constante.

En definitiva, el networking implica la realización de una serie de acciones y vinculaciones con el fin último de posicionarse en las mentes de las personas con las cuales uno se relaciona para poder acceder así a una mayor cantidad de oportunidades en el mundo del trabajo; es decir, que quienes nos conozcan sepan a qué nos dedicamos y puedan contactarnos, contratarnos, recomendarnos o bien adquirir nuestros productos o servicios.

¿Cuáles son las claves del networking?

Puesto que se trata de establecer relaciones colaborativas, hay algunos puntos que no deben pasarse por alto a la hora de hacer networking. Algunos buenos tips para esto son los siguientes: 

Asistencia a eventos: cada vez existen más eventos que posibilitan el relacionamiento y el intercambio. Sólo se trata de saber cuáles son los más accesibles y acordes a nuestras inquietudes laborales. Se los puede encontrar en redes sociales, en páginas de venta de entradas para eventos, en cámaras empresarias o colegios de determinada actividad profesional y en espacios de coworking, entre otros.

Preparación: es importante estar siempre listo para poder explicar nuestra actividad o la de nuestra empresa en pocas y efectivas palabras. Hoy en día se utiliza el concepto de ‘elevator speech’ (discurso de ascensor) que consiste en elaborar un mensaje de presentación claro e impactante en el tiempo que duraría un viaje en ascensor. También, de ser posible, sería ideal conocer de antemano quiénes serán las personas que asistirán a un evento para poder entablar una conversación efectiva, abordando temas de su interés.

 Escucha activa: es fundamental estar atento a lo que los demás tienen para decir para poder ser capaz de detectar oportunidades de interacción.

 Contacto: contar con tarjetas de presentación para intercambiar con nuestros interlocutores es una herramienta ineludible del networking. Una buena idea es utilizar las tarjetas que recibimos para hacer anotaciones clave sobre la persona que nos la dio y así poder mantener el contacto luego del encuentro. 

Presencia online: hoy en día todo se averigua en redes sociales y buscadores de internet, por lo cual es preciso cuidar el contenido que se publica y mantener actualizado nuestro perfil en Linkedin. Buscar nuestros nombres es un buen ejercicio para saber lo que internet y nuestras redes dicen de nosotros. 

Coworking: los espacios de coworking son cada vez más populares; no sólo para quienes trabajan de manera autónoma sino que cada vez son más las empresas que deciden estar presentes en ellos para, justamente, aprovechar el networking que allí se propicia.

La Comunidad de Negocios Inmobiliarios de Rosario es un buen ejemplo de ello. Próximo a su inauguración oficial, este coworking ya está recibiendo visitas para seguir incorporando eslabones a la cadena de trabajo colaborativo del rubro inmobiliario, de la construcción y de productos y servicios asociados.

Para poder conocerlo, se puede programar una visita de lunes a viernes de 12 a 18 horas en Av. Luis Cándido Carballo 183, piso 3, oficinas 1 y 2.