Por C.I. Adrián Giaganti, Colaborador CEIR
Como en cada decisión transcendental que tomamos a lo largo de nuestras vidas, es fundamental contar con el respaldo y el asesoramiento de un profesional idóneo en la materia de la cual se trate. En este caso, hablamos de nuestro inmueble; el que tanto añoramos y que con gran esfuerzo logramos obtener, el que nos marcó una etapa y tantas otras circunstancias que lo hacen tan significativo.
Es por ello que, en el momento en que se disponga comercializarlo, así sea ponerlo a la venta u ofrecerlo en alquiler, debemos decidir quién estará al frente de dicha operación y es ahí donde cobra importancia la figura del Corredor Inmobiliario Matriculado.
En cuanto a la venta del inmueble, es necesario dar a conocer que los profesionales siempre procuraremos brindar, por medio de nuestro asesoramiento, el valor de mercado que resulte más justo a la hora de buscar un comprador y que, a su vez, el comprador sepa que encontrará en el Corredor Inmobiliario a un experto que se encuentra capacitado para tasar el inmueble que se propone adquirir.
Además, surgen muchos interrogantes a la hora de la comercialización con el fin de alquilar una propiedad: ¿Quién la alquilará? ¿La cuidará? ¿Estará todo en orden al finalizar el contrato de locación?.Y ahí estamos nosotros, los matriculados, para darle al cliente la tranquilidad que necesita y generar la confianza necesaria como disipar todas sus dudas. Asimismo, les transmitimos que los futuros inquilinos cuidarán del inmueble como si fuera propio y que estaremos al servicio de ambas partes para poder llevar a cabo la premisa original de ambos de alquilar la propiedad.
Durante la totalidad del plazo que perdure la relación comercial, tanto en la venta como en el alquiler, estamos disponibles para asesorar a todos nuestros clientes, sean vendedores, compradores, locadores o locatarios. De esa manera llegaremos a poder formalizar cordialmente los objetivos de todas las partes intervinientes.
Los profesionales matriculados nos encontramos regidos por un marco legal que otorga idoneidad a la profesión que representamos; por consiguiente, siempre recomendamos recurrir a dicho asesoramiento.
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