En ediciones anteriores, dimos las claves acerca de cómo empezar la mudanza. En este artículo, te contamos qué hacer cuando – con todo embalado, rotulado, empaquetado – iniciamos el traslado.
Por Julieta Dominga – Organizadora de espacios.
Son las 8 am del viernes (porque siempre es preferible mudarnos en un fin de semana, para no andar haciendo malabares de horarios entre semana), hay que cargar el camión y emprender el viaje al nuevo destino.
Tranquilos, hicieron todo bien, que el pánico no gane terreno. Vamos paso a paso.
De lo más pesado a lo más liviano.
Lo primero que vamos a hacer es cargar el camión con los muebles, que previamente recubrimos con frazadas o algún plástico resistente para no dañarlos. De igual modo lo hacemos con la heladera, el lavarropas y demás electrodomésticos de gran porte.
Después empezamos a cargar las cajas, de acuerdo al rótulo que le pusimos y, por último cargamos nuestras valijitas o bolsos para los próximos dos días. Luego las cosas de valor.
Entonces ahora sí, es momento de emprender el viaje.
El nuevo destino
Llegamos a la nueva casa y debemos ponernos en acción y, como todo está perfectamente rotulado, no debemos enloquecer.
1) Cada cosa en su lugar
Lo primero que tenemos que hacer al bajar del vehículo y entrar en la nueva casa, es rotular la puerta de cada habitación en concordancia con los rótulos que hicimos en las cajas. Así, nosotros y quienes nos ayuden, van a saber dónde descargar cada caja y evitar el acumulamiento en el living o la entrada.
Con paciencia y sin prisa, para no entorpecer el trabajo, vamos llevando cada cosa a su lugar.
Recomiendo llevar el bolsito que armamos para los dos primeros días en la nueva casa a las habitaciones correspondientes. Después, habilitar un baño y un lugarcito de la cocina, porque los mates en plena mudanza no se le niegan a nadie.
2) Amoblar
Ahora sí, con el camino despejado, debemos distribuir los muebles en cada habitación, llevar las camas, las mesitas de luz a los dormitorios, la mesa y las sillas al comedor o la cocina, el sillón al living y así con cada habitación del nuevo hogar.
¡Alerta! Si hay garage, quincho, baulera o lavadero con espacio, les dejo esta híper recomendación: Nada de ir acumulando cosas por esos lugares con la excusa de "después lo vemos!". Porque después no vemos nada y quedan ahí cajas sin abrir, cuadros sin colgar, adornos, ropa y, en algunos casos, hasta comida que va en la alacena.
3) Atención a los detalles
Hagan las cosas bien, día por día, paso a paso, sin pausa pero con buenas horas de descanso. Primero hagan el grueso y después sigan con los detalles. Con esto les quiero decir que no cuelguen primero el cuadrito, porque es muy probable que dónde hagan el agujero no sea el lugar definitivo del adorno, armen primero parte por parte las habitaciones con lo estructural.
REVISIÓN PREVIA
Recomiendo fervientemente que unos días antes de la mudanza hagan un chequeo general, si se puede, de la nueva vivienda. Revisen con expertos, las canillas, el gas, los enchufes y otros menesteres, para que cuando llegue la mudanza esté todo en condiciones y tengamos los menos pendientes posibles.
Porque como bien reza un TipJD, recuerden siempre que "LO PROVISORIO ES DEFINITIVO" y el "lo atamos con alambre” está a la orden del día.
Les deseo que puedan conquistar sus casas y disfrutar de ellas al volver cada día.
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