Oscar Argente, José Ellena y Andrea Rinesi analizan los antecedentes del trabajo conjunto de las cámaras y resaltan las ventajas de la unión de las instituciones.

Oscar Argente, histórico referente y colaborador de CEIR, cuenta que al momento de crearse las cámaras en 1983, hubo una intención de formar una única Cámara, pero se conformaron dos Instituciones agrupando cada una de ellas a sus respectivos socios, con un constante crecimiento. “En todo ese tiempo transcurrido hasta la fecha, se han ido generando distintos lazos y acciones coordinadas entre ambas instituciones, como por ejemplo la Revista de Mercado Inmobiliario que desde hace 22 años ha llevado en conjunto las ofertas en venta y alquiler de las Inmobiliarias de las dos Cámaras al mercado”, señala y agrega que de forma permanente los miembros de ambas Cámaras han interactuado para representar a sus respectivos socios, obtener beneficios mutuos, tanto sea en instituciones nacionales como la Federación de Inmobiliarias de la República Argentina (FIRA), en mesas de diálogos con funcionarios provinciales y locales.

El interés por la formación y profesionalización de la actividad fue otro de los objetivos compartido. Argente recuerda que gracias a la acción de ambas Cámaras, y de otras entidades de la provincia se pudo lograr la promulgación de la ley 13154/2010, actualmente en vigencia y que regula el ejercicio del corretaje inmobiliario e intermediación de negociación inmobiliaria, lo que permitió la creación del Colegio de Corredores Inmobiliarios de la Provincia de Santa Fe en la primera y segunda circunscripción, “que orgullosamente nos agrupa a todos los Corredores inmobiliarios Matriculados de la provincia.” En momentos de incertidumbre como los que está atravesando y ha atravesado la economía de nuestro país, la posibilidad de aunar esfuerzos resulta fundamental.

Al respecto, Argente expresa: “lo importante es tener claros nuestros objetivos y asistir a las Inmobiliarias socias en todo lo referente a la camaradería, contención, representación y capacitación para ir superando las dificultades. Sin dudas que con la unión, las posibilidades se potencian, por lo que el sentido común nos dice que no tiene sentido que actuemos por separado”.

Por su parte, José Ellena, expresidente de CADEIROS, recordó otras acciones que se llevaron a cabo de forma conjunta como la creación de Miro 360, la realización de congresos inmobiliarios a nivel nacional, la participación en eventos vinculados al sector y una gran cantidad de cursos y capacitaciones que se llevaron a cabo para fortalecer al sector. En consonancia con su colega, manifiesta: “Más allá del momento coyuntural que nos toca atravesar; la unificación profesional fortalecerá la representación y visibilidad del sector empresarial del mercado inmobiliario, ya que mientras mayor cantidad de empresas se reúnan nuestra presencia será mayor”.

Ellena menciona algunas de las ventajas de la fusión como la posibilidad de ampliar el horizonte comercial, facilitar la interacción entre empresas asociadas, sumar la sinergia que herramientas comerciales e incrementar la calidad de las capacitaciones.

Ya pensando en la fusión, Oscar Argente confía que en la creación de una única Cámara Inmobiliaria de Rosario y la Región reunirá una gran masa societaria de empresas inmobiliarias que sumarán su calificación profesional y trayectoria, para contribuir al crecimiento la institución, incrementando las posibilidades al sumar y no dividir. “En este camino será muy importante trabajar en el objetivo de incorporar a los actuales socios de ambas Cámaras, los nuevos profesionales que se vayan integrando al mercado con su nueva inmobiliaria, por lo que se están gestando proyectos para darles una inclusión que resulte ventajosa para todos”, afirma Argente.

Andrea Rinesi, integrante de la Comisión Directiva de CEIR, coincide con sus colegas en las ventajas de la unificación: “Pienso que integrarnos nos fortalece como institución, hacia adentro con nuestros socios y hacia el afuera para la comunidad, a quienes queremos demostrar nuestra fortaleza y profesionalismo. Además, de forma conjunta podemos analizar temas o problemáticas comunes, planificar y ver cómo afrontar los nuevos desafíos que imponen estos tiempos”.

Rinesi remarca que las posibilidades son infinitas, siempre y cuando se logre una organización integral, una escucha activa de las necesidades de los socios, se posibilite el debate constante de ideas y se busque a mejora continua para acompañar el crecimiento dela institución.

A modo de conclusión, Argente expresa en estos 37 años, las Cámaras compartieron los mismos objetivos y fueron las acciones conjuntas las que lograron que se vaya gestando la idea de cambiar la historia y lograr priorizar el bien común de todos los socios Inmobiliarios, por encima de los personalismos. “Festejo que estemos transitando este momento tan ansiado, que podamos cumplir aquella idea del sueño original de que seamos una sola y única Cámara fuerte, sumándonos y uniéndonos sin mezquindades”.