En el marco del acuerdo de colaboración entre el Colegio de Corredores Inmobiliarios de Rosario (COCIR) y la Cámara de Desarrolladores Urbanos de la República Argentina (CEDU), se presentó en la sede de COCIR,  Damián Tabakman presidente de la CEDU y referente nacional del mercado inmobiliario.

El objetivo del convenio firmado apunta a trabajar en el intercambio de información entre ambas instituciones como así también identificar oportunidades de negocio para sus representados. Por otra parte, se facilitará el intercambio de delegaciones en el marco de congresos, seminarios y exposiciones del sector que se realizan año a año.

La presentación estuvo encabezada por el Presidente de COCIR, C.I Andrés Gariboldi,el tesorero,CPN Alejandro Juri, por parte de la CEDU, su Presidente Damián Tabakman, la gerente institucional  Mali Vázquez y el referente local Ari Milsztejn, mientras que en representación de la Asociación de Empresarios de la Vivienda (AEV), estuvo su Presidente,Ing. Leandro Rinaldi.

Ante un salón colmado de Corredores Inmobiliarios, Damián Tabakman expuso acerca de la coyuntura actual del mercado inmobiliario y dio su visión al afirmar “si bien los inversores continúan fríos a la espera del impacto de las nuevas políticas económicas, el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, es fundamental para recuperar la confianza. En escenarios como el actual, con un dólar alto y costos de construcción bajos en pesos, quien hoy este invirtiendo en departamentos en construcción está tomando una decisión correcta”. Por otra parte y en relación al comportamiento en los valores de las unidades usadas, Tabakman fue contundente al afirmar que “con los actuales costos de construcción, las unidades a estrenar terminarán traccionando hacia la baja el valor de los departamentos usados, mientras que los desarrollos “Premium”, con costos de construcción más bajos en pesos, terminan siendo una real oportunidad en referencia a valores medidos en dólares”

En un repaso del mercado inmobiliario en Latinoamérica, el presidente de la CEDU hizo un recorrido por las principales ciudades y si bien afirmó que no abundan las oportunidades de inversión, las rentas en dólares siempre son atractivas. Y además agregó “el inversor inmobiliario argentino medio, no es muy sofisticado, no apunta a grandes “tickets” en los comparables con las opciones de alternativas en el extranjero, es por ello que no hay que perder de vista lo local”.  Mientras que aseveró “al mercado local hay que mirarlo con atención, el mundo inmobiliario del usado padece y seguirá padeciendo la dificultad para la baja de precio y que este se acomode a los valores actuales de plaza. Distinto es el mundo de los “pozos”, tras las devaluaciones y comparado con la región, el costo de fabricación de departamentos es bajo medido en dólares.”

Con este escenario, la realidad indica que construir en Argentina es barato. Si los excedentes en pesos de la economía real se terminan volcando al mercado inmobiliario como resguardo de capital, en medio de tasas de interés negativas y con un cepo cambiario vigente, el ladrillo termina siendo un refugio de valor.