La urbe industrial y comercial, en plena expansión, ofrece múltiples oportunidades de inversión.
Por Addy Kacero a C.I. David Thau, Mat. N° 345.
San Lorenzo es la principal ciudad del departamento homónimo. Se encuentra a unos 30 km de Rosario y alberga a unos 60.000 habitantes, entre residentes autóctonos y trabajadores que se trasladan allí para desempeñar sus actividades laborales, principalmente en el cordón industrial. Famosa por la histórica batalla allí desplegada, hoy es una localidad que impulsa el comercio, la industria y -por supuesto- el desarrollo inmobiliario.
El corredor inmobiliario David Thau -titular de Thau Negocios Inmobiliarios- la describe de la siguiente manera: “Creemos que San Lorenzo se encuentra en una burbuja, con un mercado totalmente distinto al resto. Si bien no es ajena a la coyuntura actual, se mantiene siempre pujante. Por su tipología, la ciudad se está ampliando hacia el oeste y, con los proyectos inmobiliarios, también hacia arriba en zonas residenciales”.
En cuanto a infraestructura, se están llevando adelante una gran cantidad de obras, tanto de origen gubernamental como por parte de empresas privadas. La obra pública más destacada del momento es la reconstrucción del Paseo de la Libertad, sobre la costanera sanlorencina, que le dará a la zona una gran impronta, tanto recreativa como comercial.
“Con respecto a lo privado, hay numerosas factibilidades edilicias solicitadas para proyectos inmobiliarios muy interesantes. Algunos están destinados a inversores y otros apuntan más a consumidores finales” –explica el profesional- “Considero que el impacto de las obras en el mercado inmobiliario será sumamente positivo dado que San Lorenzo está creciendo en población. Ojalá que en un futuro cercano, con políticas de salud y educación, crezca aún más. Entonces, lo que son estos proyectos inmobiliarios, van a ser muy necesarios”.
El corredor destaca que San Lorenzo propone un mercado distinto como para poder invertir en bienes raíces, con la posibilidad de adquirir propiedades que -en este momento- cotizan a un valor del metro cuadrado en dólares relativamente bajo con respecto al mercado internacional. Además, también está en auge la comercialización de loteos en zonas aledañas, con planes de financiación muy accesibles para el público en general.
Como conclusión, el empresario agrega que “el mercado no está estancado, sino que se moviliza en la medida en que los inmuebles, en sus tres aristas –ubicación, precio y calidad- estén en sintonía. Yo creo que hay mercado, hay movimiento y hay perspectivas muy positivas para la ciudad”.
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