Tradicionalmente, la zona sur de la ciudad siempre se caracterizó por sus edificaciones bajas y sus viviendas generalmente familiares. En la actualidad, gracias al crecimiento de sus principales corredores comerciales –las avenidas San Martín, Arijón y Ayacucho- se están visualizando cada vez más las construcciones en altura y la inversión en propiedad horizontal.

La instalación del casino, la llegada de los trenes a la estación Rosario Sur y la reciente reanudación de las obras en el Hospital Interzonal de Villa Gobernador Gálvez, conjuntamente con obras de infraestructura como pavimentación y extensión de redes cloacales, de gas y de servicios de cable, telefonía e internet, le fueron confiriendo a la zona una revalorización que propicia que ésta sea mirada con otros ojos, tanto por la población en general como por nuevos inversores.

Así lo explica Cristian Iannitto Graziani, titular de Graziani Propiedades Rosario: “A la gente que por tradición elige la zona sur para vivir, se le está sumando un nuevo grupo de inversores o de gente decidida a vivir acá por un tema de cercanía con el trabajo, de la mejora en los servicios y de la mayor comodidad. Poco a poco se están dando cuenta del potencial que tiene. Es por eso que las obras públicas están creciendo y las constructoras están aprovechando cada vez más la posibilidad de adquirir terrenos, de invertir”.

Entonces, al público más representativo del distrito, que siempre han sido las familias en búsqueda de viviendas familiares, se le están sumando ahora también estudiantes, gente soltera o parejas que buscan inmuebles del tipo de propiedad horizontal. En virtud de esto y de algunas líneas crediticias que posibilitan el acceso a la vivienda, están proliferando las construcciones de complejos, principalmente sobre la Av. San Martín.

“Un factor importante que los inversores están empezando a notar es el tema de la rentabilidad. Al tener este confort de servicios que de a poco se va consolidando, líneas de transporte a disposición, arterias comerciales cerca, está resultando ser un nicho de inversión cada vez más interesante como para poder obtener una renta a través de las locaciones, que resulta significativamente mayor que en otra zona en relación con el precio de las propiedades y el monto de capital inmovilizado. El inversor inmoviliza mucho menos capital para obtener la misma rentabilidad” –explica Cristian.

Según el corredor inmobiliario, a partir de mayo de este año comenzaron a incrementarse las consultas y las visitas, tanto en búsqueda de viviendas como de locales comerciales, galpones y lotes. “La expectativa para lo que resta del año es muy positiva. Siempre los ladrillos han sido el refugio prioritario para todo tipo de ahorro. El mercado inmobiliario, de la mano de corredores profesionales, constituye un respaldo a la inversión”.