Las Cámaras (CEIR y CADEIROS) y Locativa, desde hace más de un año, acuerdan acciones que sean parte de la solución al e problema del alquiler.
Diego A Baidon, Locativa.
El alquiler es un tema sensible, quizás tanto como las dificultades económicas que atravesamos muchas personas y porque, en definitiva, estamos hablando de nuestra vivienda o de nuestro trabajo. Por ello, es sumamente importante tomar medidas prácticas a la hora de facilitar el acceso y aumentar la cantidad de personas en condición de alquilar, revistiendo de seguridad y practicidad el sistema.
Con este desafío, Las Cámaras (CEIR y CADEIROS) y Locativa, desde hace más de un año, acordamos acciones que sean parte de la solución a este problema. Desde cada lugar, hemos trabajado para dinamizar el sector, mejorando los requisitos de ingreso y sumando tecnología, en más de 200 inmobiliarias a través de charlas, entrevistas y capacitación.
Pero la pregunta resonante es: ¿cuánto hemos colaborado en relación a la cantidad de personas que tienen complicaciones para alquilar? Desde Locativa consideramos que para responder esta pregunta necesitamos rever y delimitar las verdaderas problemáticas que encierra el alquiler:
El Precio: Si bien los precios no son los que preferimos como inquilinos (nos gustaría pagar menos), no podemos desprenderlo de la situación socioeconómica que vivimos. Tampoco podemos dejar de ver que el 80% de los propietarios son dueños de 1,3 viviendas y que su baja rentabilidad (2,5% anual) apenas colabora en sus ingresos.
El dinero del ingreso: no hay oferta de financiamiento para alquilar, entonces nos encontramos con que los gastos de ingreso, mudanza y reacomodo, superan los 4 alquileres promedio.
Relaciones tensas: La desconfianza -aumentada por algunos titulares mediáticos- entre las partes resulta un común denominador que no favorece el buen inicio y la buena finalización de los contratos.
Los tiempos y la intervención de la Justicia: No existe una intervención de la justicia acorde a los tiempos que necesita el sector para regular las relaciones y generar confianza y descanso de las partes
Las garantías: es quizás el aspecto más crucial y el que más se está revirtiendo poco a poco. Mejorar los tiempos de respuesta, ser conscientes de la relación económica necesaria entre alquiler y aval, mirar la seguridad financiera detrás del co-deudor, son algunos de los parámetros que debemos continuar mejorando.
De seguro, si la problemática subsiste en gran escala, es porque nos queda trabajo por hacer. Ante ello, nuestra dirección junto a las Cámaras y otros actores fundamentales del sector, es la de trabajar con herramientas que promuevan el alquiler y lo resguarden: en concreto, mejorar los tiempos, dar facilidades para el ingreso y tomar garantías prácticas y solventes, que aseguren el pago de todos los compromisos asumidos hasta la restitución del inmueble.
En este camino, nuestra filosofía nos acerca a las entidades del sector en la búsqueda de un ganar-ganar-ganar, en el que estamos convencidos de poder colaborar desde nuestro lugar y con las herramientas existentes.